...la libertad no solo evoca el espacio, ni se aferra a cuestiones temporales, la libertad va mas allá de muros y fronteras y de penas capitales, no sueña con ir mas allá de las estrellas, no necesita puertas, mucho menos estatuas sin pena, ni paginas en los libros de historia, la libertad no tiene memoria, la libertad no es solo una condición, mas bien debe ser una elección, un acto voluntario, mucho mas que un escenario, una condena al valor, la libertad no vive afuera de la cárcel, ni se esconde en las sueños de los libertadores, la libertad no solo es para triunfadores, la libertad es una mentira convertida en verdad, la libertad es volar, la libertad es brincar, la libertad es escapar de lo que parece tan normal, sin voltear nunca para atrás, la libertad es fugas, pero una a una es eterna, la libertad es un poema mas que un lema, una lección que todos tendríamos que pasar, la libertad es ser nosotros mismos cuando el mundo quiere que seamos alguien mas...
Los presos políticos uruguayos no pueden hablar sin permiso, silbar, sonreír, cantar, caminar rápido ni saludar a otro preso. Tampoco pueden dibujar ni recibir dibujos de mujeres embarazadas, parejas, mariposas, estrellas, ni pájaros.
Didaskó Pérez, maestro de escuela, torturado y preso por tener ideas ideológicas, recibe un domingo la visita de su hija Milay, de cinco años. La hija le trae un dibujo de pájaros. Los censores se lo rompen a la entrada de la cárcel. Al domingo siguiente, Milay le trae un dibujo de árboles. Los árboles no están prohibidos, y el dibujo pasa. Didaskó le elogia la obra y le pregunta por los circulitos de colores que aparecen en las copas de los árboles, muchos pequeños círculos entre las ramas: - ¿Son naranjas? ¿Qué frutas son? La niña lo hace callar: -Ssshhhh. Y en secreto le explica: - Bobo. ¿No ves que son ojos? Los ojos de los pájaros que te traje a escondidas.
0 comentarios:
Publicar un comentario